Una de las cosas que más disfrutan los dueños de mascotas es llenar su celular con un centenar de fotos de ellas, pero no todas se ven bien…
Aquí van unos cuantos consejos para fotografiar a tu mascota.
¡Número uno!
Nunca uses flash: los perros, gatos o cualquier otro animal no entienden la fotografía, no saben que están siendo fotografiados. Si utilizas flash lo único que lograrás es asustar a tu mascota; procura disponer de luz natural procedente del exterior.
¡Número dos!
Enfoca a los ojos: Siempre. Como con los humanos. Gran parte de la expresión facial de los animales procede de sus ojos, así que procura enfocarlos bien.
¡Número tres!
Busca inspiración: Antes de planificar la sesión fotográfica utiliza referentes de otros fotógrafos para encontrar inspiración y nuevas ideas.
Ten en cuenta no capturar a tu gato o perro desde arriba, mejor ubícate a su nivel, puedes ponerte de rodillas, o tumbarte boca abajo. Adoptando esta perspectiva conseguirás una foto muy “de tú a tú”.
¡Número cuatro!
Busca un buen fondo: El fondo es un elemento principal en la composición. Condiciona toda la foto. No es lo mismo un fondo de color uniforme que de varios colores, un fondo simple que compuesto, un fondo enfocado que uno desenfocado.
¡Número cinco!
Planifica el disparo: Hay que reconocer que estas nuestras mascotas son inquietas y a veces no colaboran, así que necesitas planificar la foto tranquilamente. Escoge un buen momento, prepara la cámara y deja que el animal te vea con ella un rato hasta que deje de resultarle extraña. Mientras tanto ve pensando en el tipo de foto que buscas, la composición, etc. Recuerda que una vez te pongas a capturar la foto tendrás probablemente muy poco tiempo antes de que tu amigo huya, así que utiliza velocidades de disparo medianas o elevadas, para congelar el movimiento.
Y por último el consejo más importante de todos: Hazlo todo con amor y diviértete durante la sesión.
